Comida china
Me gusta la comida china.
Hubo una época de mi vida en la que odiaba ese tipo de comida. Más de una y más de dos discusiones tuve con mis amigos por ir a comer a un restaurante chino.
Y sin embargo, aún no sé cómo, un día decidí que estaba enganchada a la comida china.
Sí, no es sólo que me guste, es que cada cierto tiempo necesito pedir comida china, o ir a un restaurante chino, y probar esos extraños sabores, esas sustancias que prefiero no pensar de dónde pueden salir.
El caso es que en el fondo siempre hay cosas en nuestra vida que antes no nos gustaban y ahora nos encantan, o viceversa.
Las comidas, la música, el cine, los amigos, las parejas, las ciudades.
Ahora, ahora que ya no estoy en casa, me doy cuenta de que odiaba cosas que son absolutamente fundamentales para una buena vida.
Claro, "nunca digas de este agua no beberé", si es que el refranero popular sabe más que nadie.
Adoro la comida china, y no me gustan muchas de las personas que antes necesitaba en mi vida, llamadme rara.
Hubo una época de mi vida en la que odiaba ese tipo de comida. Más de una y más de dos discusiones tuve con mis amigos por ir a comer a un restaurante chino.
Y sin embargo, aún no sé cómo, un día decidí que estaba enganchada a la comida china.
Sí, no es sólo que me guste, es que cada cierto tiempo necesito pedir comida china, o ir a un restaurante chino, y probar esos extraños sabores, esas sustancias que prefiero no pensar de dónde pueden salir.
El caso es que en el fondo siempre hay cosas en nuestra vida que antes no nos gustaban y ahora nos encantan, o viceversa.
Las comidas, la música, el cine, los amigos, las parejas, las ciudades.
Ahora, ahora que ya no estoy en casa, me doy cuenta de que odiaba cosas que son absolutamente fundamentales para una buena vida.
Claro, "nunca digas de este agua no beberé", si es que el refranero popular sabe más que nadie.
Adoro la comida china, y no me gustan muchas de las personas que antes necesitaba en mi vida, llamadme rara.
4 comentarios
inocuo -
M -
Nunca sabes qué será o no santo de tu devoción, pasa con amigos, pasa con sabores, con olores, comidas... pasa con la vida, hay días en los que te levantas sin ganas de nada, con una inapetencia asquerosa, y otros en los que te quieres comer el mundo. La vida está llena de sorpresas... solo hay que dar oportunidades.
Por cierto... llevo años comiendo en restaurantes chinos, ahora los tengo un poco atravesados...
Un beso guapa, uno a ti y otro a todos/as los/as que siempre hemos sido un tanto "raros"...
M
Helena -
Pero sí me ha pasado con la verdura cocinada, sólo comía verduras crudas, y han tenido que pasar 33 años para que me dé cuenta de que me gustan cocinadas tanto como crudas...qué malo es cerrar tu razón antes de conocer...mira que soy...llegar a prejuzgar a unas simples verduras...;)
Besos.Adiós.
Miguelito -
Esta semana te pegaré un toque, desaparessssida.