Reflexiones
Cómo cuesta escribir cuando sabes que debes, pero no tienes nada especial sobre lo que hablar...
Porque podría -como mi compañero Paco- ponerme a hablar de lo triste que se está volviendo una serie otrora graciosa como "Los hombres de Paco", pero ya lo ha escrito él, y no creo que pueda mejorar su opinión.
O podría seguir hablando de lo rico que estaba el roscón de nata que me tomé (que aquí en Málaga descubro que lo llaman "Rosco", o eso creo).
También podría hablar de fútbol, de cómo el Madrid arrasa en Liga y no es capaz de ganar en Copa (continuando quizás así con la maldición que nos persigue en esa competición).
O escribir sobre música, cine, un disco duro multimedia que es mi nuevo hijo...
Pero lo cierto es que no me apetece demasiado. Tampoco tengo ganas de contar lo DECEPCIONADA (con mayúsculas) que estoy con ciertas personas, con quienes ha comenzado este 2008 una nueva época, sin duda.
La verdad es que si tiro de la manta hay muchos temas que tratar aún, muchos, todos, pero prefiero quedarme con mi Nesquick, la radio de fondo, mi estufita y navegar por la red con mi velero, mientras el sol golpea mi cara y sueño despierta con viajes planeados, amigos añorados y familia ausente...
¿Os subís al velero?
1 comentario
becquer99 -
Nos vemos en el curro.