Lo que no ves
Cuando el refugio es una canción, a falta de abrazos.
Cuando las sombras acechan detrás de cada esquina.
Cuando no sabes si lo que haces es o no es correcto.
Y cada tropiezo es una mirada hacia atrás.
Y esas sombras te agarran los hombros.
Entonces tiemblas. Algo falla, pero no sabes qué es.
No hay palabras que lo expliquen, y las miradas opacas ya no transmiten más.
Tengo miedo, no sé a qué, ni a quien, tal vez a mí misma.
Pero me asusta todo. Hay un abismo que no consigo comprender.
1 comentario
Paco -
Es curioso, pero a mí me sobrevienen fuertes etapas de un mayor miedo tras los momentos de inactividad. Después de unos días sin trabajar por ejemplo, o sin mucha relación social. Pero en realidad siempre tengo miedo. Siempre.
Un abrazo grande.