El cautivo
Desde la casa de D. observo el paso de la procesión del Cautivo, una de las más tradicionales y bonitas de la Semana Santa malagueña.
Ayer por fin conocí a A., el hijo de R., una personita que irradia felicidad y que nos va a hacer a todos mejores.
Pasé un bonito día en La Herradura, acompañada de dos de las personas más importantes de mi vida, y metiendo en ésta a alguien que va a ocupar indefectiblemente otro hueco que estaba vacío.
Veo en la tele anuncios de nuevos programas en los que Telecinco machaca la figura de la periodista Encarna Sánchez. No lo comprendo. Repudio mi profesión, y sobre todo a las personas, sin más, cuando veo cómo se ataca sin piedad, con acusaciones baratas, a una persona fallecida hace tiempo. Me da igual si fue una buena o mala persona, no soy quién para saberlo. Pero crecí escuchándola, mostrando su prepotencia, todo lo que queráis, pero ¿merece alguien, que no ha matado a nadie, un ataque tan feroz por parte de quienes colaboraban con ella? Hay que ser cobarde, tremendamente cobarde, para actuar de esa manera.
Yo, como cualquiera de vosotros, también he trabajado con gente indeseable, personas que merecen mi máximo desprecio, pero no me imagino hablando barbaridades de ellas una vez fallecidas, sin permitirles el derecho a la réplica, a la defensa.
Ni todos somos tan buenos, ni algunos son tan malos. Nuestros actos a veces no se acompañan de la bondad que creemos, y nosotros también hacemos daño a quienes nos rodean.
Por esa razón, y porque me molesta sobremanera este tipo de actos, me siento ofendida cuando veo que siguen atacando a muerte a quien no tiene ya voz para la defensa. Hay que ser muy inhumano, hay que ser muy malo, hay que ser un auténtico cabrón (con perdón), para atreverse a decir todo lo que dicen personajes de tal bajeza moral que merecen desaparecer de los medios de comunicación.
Lástima que la imagen de los periodistas se refleje en gentuza como esta. No, no me siento para nada identificada, ni ofendida siquiera si alguien decide criticar a toda la profesión. Me da igual, yo no caería en eso, pero no por ser mejor o peor periodista, sino porque mi educación me impide ser cruel.
En fin, que tenía que desahogarme, que me quema la rabia por ver este tipo de espectáculos barriobajeros. Y no sé qué pensaréis vosotros, pero vaya, aquí queda esta tribuna abierta. Admito críticas, admito halagos. Admito todo...
5 comentarios
Helena -
Ayer me comentaba un amigo de una conocida común, había empezado a trabajar de azafata en la tele. Simplemente con verla se notaba su mejora económica, me gustaría ver si la mejora es total, la verdad es que intentamos engañarnos pensando que algo en su vida va mal, no nos gustaría saber que todo le va bien.
Cuesta aprender a vivir de tu bien en vez de mal de otro.
Un beso.
Toperro -
Lo que no pase y se haga en este país no se hace en ninguno.
M -
Espero que nos veamos pronto, como mínimo el día 1 de mayo para ver a los Kings of Convenience!!!!...yuuuuuuuuuujuuuuuuu
MIguelito -
Becker -
Una curiosidad, la otra tarde en un programa de Antena 3, hicieron un mini-reportaje sobre los jovenes, lo bien preparados que estabamos, que somos la generacion mas preparada y en realidad somos los que tenemos que aceptar los empleos peor pagados en comparacion con nuestra preparacion. Escuchando el programa, me ponia a pensa ren gente como la Belen Esteban esa o el Kiko ese del Puerco Hermano que trabajan como colaboradores y me pregunto...¿no serviría paar esos puestos algunos de los muchos jovenes parados que habemus en España?